Algunas de las averías más comunes en las calderas de gas pueden incluir:
- Problemas con el encendido: Si la caldera no enciende, es posible que haya un problema con la chispa de encendido o el sensor de llama.
- Presión baja: La presión de la caldera puede caer por diferentes motivos, como una fuga en el sistema o un problema con la válvula de llenado.
- Bloqueo en el sistema: La caldera puede bloquearse si hay un problema con la bomba, el intercambiador de calor o la válvula de tres vías.
- Fallos en el termostato: Si la caldera no se enciende o no se apaga según lo programado, el termostato puede estar defectuoso.
- Fugas de gas: Si huele gas alrededor de la caldera, es importante apagarla de inmediato y contactar a un profesional. Las fugas de gas pueden ser peligrosas.
Es importante recordar que las calderas de gas deben ser revisadas y mantenidas regularmente por un profesional autorizado para asegurar que estén en buenas condiciones de funcionamiento y reducir el riesgo de averías. En Mantenimientos Rey puedes contratar nuestro servicio de mantenimiento preventivo – correctivo dado que tenemos una formación específica actualizada por el fabricante y aseguramos el empleo de repuestos originales.